¿Estás pensando en comprar o alquilar una vivienda y no sabes qué necesitas o qué es la cédula de habitabilidad? En Bourgeois Fincas te explicamos todo lo que necesitas saber sobre qué es la cédula de habitabilidad.
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ToggleCédula de habitabilidad, ¿qué es?
La cédula de habitabilidad es el documento administrativo que prueba que una vivienda cumple con los requisitos técnicos e higiénicos mínimos. Es decir, que cumple con las condiciones mínimas de habitabilidad que prevé la normativa para poder vivir en la vivienda. Es necesario contar con esta cédula en caso de querer contratar servicios y suministros, venderla o alquilarla.
Los requisitos de la cédula de habitabilidad
Para contar con el certificado de habitabilidad y saber cuáles son las condiciones básicas que debe contener, dependerá de la comunidad autónoma en la que esté la vivienda y también del año de construcción de la misma. Hay ciertos aspectos que siempre se miran como la superficie útil mínima de vivienda, la altura libre, los huecos y las dotaciones mínimas.
Existe un profesional preparado para realizar el informe. Este acostumbra a ser un arquitecto técnico o superior. Sin embargo, la persona que acepte si es apta o no será un técnico del ayuntamiento y será quien firmará la cédula.
¿Cuál es el precio de la cédula de habitabilidad?
La cédula de habitabilidad es responsabilidad del propietario a no ser que se pacte lo contrario.
El precio va a depender de si se gestiona directamente la contratación de un técnico que te realice el informe. En caso de ser así, este informe técnico va a tener un coste de 59 euros con IVA incluido.
Si estás alquilando una vivienda que está en uso, se deberán pagar las tasas correspondientes. Éstas rondan en aproximadamente 43 euros.
La suma de estos dos gastos te supondría más o menos 102 euros aproximadamente.
Cómo renovar la cédula de habitabilidad
En el caso de querer renovar la cédula de habitabilidad vamos a tener que pedir una certificación de la cédula de habitabilidad realizada exclusivamente por un arquitecto o arquitecto técnico. Aparte de esta certificación, necesitaremos la garantía que dicha vivienda fue construida dentro de los parámetros legales en los que se rige la ley.
¿Cómo se tramita?
Tramitar y obtener la cédula no es tarea complicada:
- Primero, deberemos acudir a un arquitecto o arquitecto técnico y solicitar un Certificado de Habitabilidad visado por su Colegio profesional. Este profesional realizará la inspección visual de la vivienda para comprobar si cumple o no con la normativa vigente.
- Entregar el certificado de habitabilidad de primera ocupación a la administración junto con el resto de documentación necesaria pidiendo cita previa en la oficina correspondiente de tu comunidad autónoma o bien, realizarlo de forma online.
¿Tiene caducidad?
Las viviendas que hayan tramitado su cédula de habitabilidad con anterioridad al año 2004 tienen una caducidad de 10 años.
A partir del año 2004, las cédulas de habitabilidad tienen una caducidad de 15 años, tanto las de primera ocupación como las de segunda.
Por otro lado, a partir del año 2013, las licencias de primera ocupación pasan a tener 25 años de vigencia, que serán 15 en los casos de segunda ocupación o primera ocupación de rehabilitación.
¿Qué datos contiene la cédula de habitabilidad?
Puede variar según la Comunidad Autónoma, pero la información básica que debe constar en este certificado es la siguiente:
- Dirección de la vivienda: calle, código postal, municipio, población, etc.
- Superficie útil en m2
- Distribución de la vivienda como habitaciones y espacios
- Ocupación máxima de personas
- La identificación del profesional que ha emitido el certificado
Multa por alquilar una vivienda sin cédula de habitabilidad
Aunque se puede vivir sin cédula de habitabilidad, te arriesgas a complicar algunos trámites como el seguro del hogar, dar de alta a los servicios de luz, agua y gas o empadronarse.
Vivir sin esta cédula supone una sanción sea un local, oficina o estudio. El precio a pagar será el procedimiento para legalizar la situación o restituir el inmueble a su estado anterior, además de imponerse un expediente sancionador.
Vender un piso sin cédula puede suponer el desahucio de una vivienda sin que las personas afectadas puedan acceder a los recursos públicos o a la Mesa de Emergencias.
Para poder vender un piso, ¿es obligatoria la cédula de habitabilidad?
Existen una serie de comunidades autónomas en las que esta cédula se encuentra vigente por lo que sí se exigirá el documento para la compraventa del inmueble. Por lo tanto, es necesaria la cédula a la hora de vender un piso para saber si esa vivienda es habitable.
Aun así, existen situaciones en las que puedes vender un piso sin contar con la cédula de habitabilidad: cuando tienes intención de reformar o derribar la vivienda; cuando se utilice el inmueble con una finalidad distinta al de vivienda; cuando no se haya podido presentar la cédula de habitabilidad antes de tiempo, entre otras.
Tipos de cédulas de habitabilidad
Dentro de los tipos de cédulas de habitabilidad podemos encontrar tres tipos según usos y características:
- Cédulas de habitabilidad de primera ocupación: este tipo de cédulas se caracterizan por el otorgamiento de una licencia que dispone el ayuntamiento de cada comunidad autónoma al responsable de la obra de la vivienda, es decir, al promotor.
- Cédulas de habitabilidad de primera ocupación de rehabilitación: esta cédula se estipula cuando las obras pertinentes a la vivienda modifican de forma considerable la dicha, como, estructura o la redistribución del espacio.
- Cédulas de habitabilidad de segunda ocupación: cédulas que se otorgan para el alquiler o venta de la vivienda, la cual ya estuvo habitada anteriormente.
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