Lo dijo Mies van der Rohe. Menos es más. Tres palabras que se convirtieron en una forma de vida y que resume este movimiento que hoy queremos presentarte. Seguro que ya has oído hablar del estilo minimalista pero, ¿te has planteado alguna vez apostar por él para decorar tu casa? Libera espacios y cede todo el protagonismo al orden y al equilibrio. O, dicho de otra forma, minimalízate.
El estilo minimalista es una corriente estilística que ha revolucionado el arte, el diseño y la arquitectura. Desde finales de la década de los 80 pero especialmente a comienzos de los 90, ciudades como Nueva York o Londres se llenaron de proyectos con esta imagen.
Pero, ¿por qué ha tenido tanto éxito? El minimalismo no es solo una forma de ubicar los muebles o de escoger los colores para tu hogar. Solo el punto de partida ya indica que detrás de esta corriente, hay mucho más. Inspirándose en la filosofía zen japonesa, esta decoración te devuelve a la esencialidad, al origen, a lo fundamental. No llega a eliminar la ornamentación pero sí tiene claro que hay elementos como la luz o la sensación de equilibrio que tienen más importancia. Hay elementos invisibles que se perciben y transforman la estancia. El minimalismo huye de las estridencias y susurra a través de pequeñas sutilezas.
Los japoneses Tadao Ando o el español Alberto Campo Baeza son ejemplos de arquitectos que se inspiran en el estilo minimalista para sus proyectos.
Las 5 claves del estilo minimalista
- Menos objetos. Algunos temen este momento pero elegir objetos y descartar algunos no significa vaciar tu casa de vida. Simplemente, se trata de quedarte con aquellos elementos que sí aportan personalidad a tu hogar y no esconden su auténtica esencia. ¿Qué se pretende conseguir a través de esta técnica? Crear ambientes con más oxígeno y más libertad. Cada objeto tiene su razón de ser.
- Otro de los elementos más importantes en las claves del estilo minimalista son los muebles. En este caso, se decantan por formas geométricas puras: líneas rectas y sencillas. La simetría se respeta especialmente y siempre se colocan con el objetivo de aprovechar el espacio de la estancia.
- Los colores no pueden quitar protagonismo a los muebles. El blanco y el gris son los tonos favoritos. No obstante, también podemos incorporar bloques de un determinado color, un poco más vivo, para jugar al contraste con los tonos neutrales y dotar de personalidad nuestra casa.
- Materiales puros como la madera, el cristal o el metal son los grandes presentes.
- No descuides la iluminación. Siempre es mejor disponer de luz natural pero, si no es posible, puedes optar por lámparas modernas que inunden de calidez tu hogar.
Otra de las claves del estilo minimalista consiste en establecer una relación de armonía y sentido.
El minimalismo es mucho más que un estilo decorativo. Es una forma de vida. Una manera de entender tu hogar. Es acercarte a su esencia más pura. Y tú, ¿vas a escoger este estilo para decorar tu casa?